Porfín. Porfín vuelvo a los vagueos de silencios interminables. A los pasajes gratuítos de relax los fines de semana. Sí, se acabó y, ahora, sólo tenemos la mente en cómo nos pintaremos la cara el primer viernes de carnaval. Porque la ilusión nadie nos la quita. Tenía ganas de volver a sentir ésto. Perderme en una copa de arena y fundirme entre los granos, resbalando con el tiempo, sin perderme entre paréntesis y pausas que ralentizan ésta monotonía.Vamos a olvidarnos por una vez que los problemas aún duelen en la espalda, que son heridas por cicatrizar y no hacen más que abrirse con el paso de los días cuando, vuelvo a caer en la intención de ser perfecta.