viernes, 18 de diciembre de 2009

Bonitas fechas...

Queridos Reyes Magos:
Aquí me siento un nuevo año, cual niña pequeña, escribiendo una infantil carta de Navidad... Pero no por ello con menos ilusión, no. Todo lo contrario. Con el deseo de encontrar esa mañana del día 6 enero, lo que os pido.

Este año ha sido tan díficil. Ha sido de esos en los que tu vida parece una montaña rusa que nunca acaba. Un día estás sonriendo y al otro no encuentras una mínima razón para no derramar esas lágrimas que te consumen.


Pero sí. Su fuerza iguala a la de nosotras tres juntas, y por eso vuelves a estar sobre esas incómodas camas del hospital, una y otra vez. Y es que justo ahora es cuando me doy cuenta de que te necesito más de lo que pensaba. Y es que sólo tu me entiendes, sólo tu que ahora no estás, que pasas las noches lejos de mi, que no me arropas antes de besarme calidamente, que no chocamos las miradas cansadas y vagas en el desayuno.



Yo quisiera ser valiente, mirarte y transmitirte esa vitalidad que necesitas, porque sabemos que todo saldrá bien, darte lo mejor de mí. Y una clase más de física aburrida si eso te haría feliz, y un último paseo en coche hasta el infinito escuchando tu música, y una pelea menos que quizá fueron demasiadas... Pero para qué hablar sólo de lo malo ¿No cuentan todos los momentos felices que me has regalado? Las visitas inesperadas, los chistes de la cena, las conversaciones mágicas de antes de llegar a ballet...


Nuevas amistades. Personitas que marcaron tu corazón. Amor, desamor, amor... Sonrisas y fotos que decoran la pared de mi habitación. Aventuras...

Pero no puedo evitar pensar en esas noches oscuras, noches tristes, noches en las que un recuerdo baraja todas y cada uno de tus sentimientos. Y pienso... quizás no fueron suficientes besos, suficiente cariño... Queridos Reyes Magos; este año quiero a mi papá por Navidad. Quiero que se acaben todas las historias interminables, quiero que se ponga bueno, quiero poner un punto y final. Quiero volver a tenerlo a mi lado, quiero que sea como antes, que no sufra... por favor... No es tan complicado ¿no?

A sus majestades; los Reyes Magos de Oriente.